En Copenhague ya
vimos que era uno de los tonos populares, y el resto de capitales de la moda no han hecho sino confirmarlo: el azul
bebé, en particular, será uno de los que arrase en los meses venideros, en toda prenda posible. Por un lado
encontramos irresistibles abrigos acharolados, como los de Proenza Schouler. Pero también trajes de chaqueta, como en
Versace o Staud. Rodarte o Fashion East lo versionan en formato vestido que también se tiñe de pies a cabeza, mientras
que Palomo Spain juega con este matiz a través de las transparencias estampadas. En algunas firmas este tono deriva
hacia tintes más verdosos, como sucede en Fendi o Jason Wu.
Escribe tu comentario